Un grupo de jóvenes diseñadores tratan de cambiar el concepto de
“industria de la moda” por “la moda como arte”. El Museo de Arte de El
Salvador (MARTE) se convirtió, en la noche del dia jueves 1 de Marzo, en sede de una
pasarela vanguardista con el fin de brindar oportunidades a los
artistas. Ver la moda como un arte y no como producto es el objetivo de los
modistas. Se trata de una revolución del pensamiento, donde la pasión,
la expresión y el sentimiento sean las características principales en el
arte de la moda.
la pasarela llena de color, diseños
vanguardistas e innovadores y con la huella de jóvenes talentos que aman
la moda, la paleta de colores que predominó en cada uno de los diseños
modelados son el rosa, blanco, morado, negro como también las
tonalidades de menta, naranjas profundos, amarillo, beige entre otros.
Algunos creadores hicieron uso de los estampados y las rallas como
también de tendencias clásicas basadas en los años cuarenta.
A criterio personal creo Las herramientas tecnológicas aportan grandes beneficios para los
modistas. Programas como Adobe Phothoshop, Adobe Ilustrator y Adobe In
Design, entre otros, son algunos de los instrumentos que se utilizan
para el diseño. Sin embargo, la tecnología trae consecuencias negativas para los
diseñadores. La creatividad se ve afectada a la hora de diseñar. Con
tantos “websites” y programas, la imaginación queda relegada, ya que se
encuentra todo en la computadora. Se trata de innovar con los recursos que se tienen hoy en día. Los
jóvenes artistas pretenden utilizar nuevos mecanismos para cambiar el
pensamiento de las sociedades.Las propuestas son buenas pero carecen de originalidad entrevistando a un par de diseñadores nos dimos cuenta que han estudiado algunos en el extranjero ,o aun han tenido la oportunidad de viajar ,es basicamente lo que plasman en sus diseños de otras culturas perdiendo el valor de como se vistieran un salvadoreño.
La razón es que en ese entonces no existía la carrera de diseño de modas en El Salvador, hasta el año 2013 se implementó como tal, sin embargo, diseñadores como Sara Hernández que se graduó en el instituto Marangoni si diseña acorde al contexto salvadoreño, trabajando conjuntamente con artesanos de Nahuizalco, como lo hizo para diseña la vestimenta deportiva para las olimpiadas de Londres 2012, para el cual se inspiró en un símbolo nacional como lo es la flor de izote
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